Empezamos la semana con el examen de Lengua, una gran liada,( pero dentro de lo que cabe puede ser que tampoco haya salido tan mal,) y ayer Matemáticas, del que preferimos no hablar, ya que mientras hacíamos el examen se oía a gente llorar; la verdad, es que tenemos que empezar a trabajar más o a atender más o a estar más tranquilos en los exámenes, porque si no a este paso, nos estamos dando cuenta que la media de nuestra evaluación va a ser por lo menos catastrófica, pero bueno, el caso está en centrarse en los que vienen ahora, para ir más tranquilas y para poder rendir más.
Porque ya no estamos en la ESO y ya empieza todo a contar, por lo que estamos el triple de agobiados.
Pero bueno, ahora nuestras cabecitas sólo pueden pensar en Nietzsche en Marx, en Feuerbach y demás autorcillos, según Jaime más fáciles que el mecanismo de un chupete, pero que no lo son tanto.
Y ahora mientras escribo, la gente de la clase nos estamos llevando un gran palo, Sonsoles está repartiendo los exámenes de mates, así que deseadnos suerte.
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